Joyas y vino, ¡un lujo!

Hace un tiempo venía observando estas joyas. Realmente son para quienes quieren compartir (¡y exteriorizar!) su gusto y cariño por el vino. Los íconos a los cuales se recurrió para diseñarlas son naturalmente los universales, no obstante se les incorporó de una forma más bien delicada, incluso en algunos casos de forma abstracta, con formas tenues y aplicaciones sutiles… ¡Todas son de muy buen gusto!

Ahora bien, la joyería es un arte muy singular. Así como es artesano, tiene una gran dosis de sofisticación. El hacedor o hacedora suelen ser personas sensibles, detallistas, amantes de la belleza y la estética. Trabajan con dedicación en cada pieza que elaboran y en su quehacer no dejan de tener en mente, a quien algún día llevará puesta su obra. Por otro lado, el trabajar con metales no es una labor fácil. Muy por el contrario, se requiere habilidad, destreza y tenacidad sumados a buenas dosis de paciencia y determinación.

En fin, les dejamos admirar la selección que hicimos y de paso encontrar, aquellas puntos de convergencia que tiene la joyería, con el hacer de vinos… ¡Se van a sorprender!

¡Salud!

IdV